"Señorito Federico:
Usted no va a acordarse de mí ahora porque ha pasado
el tiempo y es famoso y yo solo soy un chico del pueblo,
de su pueblo (…)bueno pues aunque no se acuerde de mí por los años que han pasado sin vernos las caras yo a usted sí le recuerdo de Fuente Vaqueros
y de después, porque ser un poeta muy grande nos da esa ventaja a los demás, oigo hablar de usted leo cuando le hacen interviús en los periódicos y me he comprado
los dos libros que ha hecho. yo sé muchísimo de usted y usted me ignora."


"El abrecartas",
Vicente Molina Foix ( Barcelona, 2006) comienza con las cartas que un amigo de infancia escribe en los años 1920 a Federico García Lorca, inspirador lejano de sus anhelos y sus sueños. A partir de ese primer episodio de una correspondencia quizá nunca 'correspondida', el lector seguirá el curso de lo que el propio Molina Foix llama 'novela en cartas'.